El Día del amigo existe como fecha -efeméride- desde que yo tengo memoria, O sea, desde 1985. Existía como existe el Día del animal. Pero a partir de mediados de los 90 empezó a efervecer esa necesidad imperiosa de juntarse con amigos el 20 de julio a festejar. Hasta entonces, a lo sumo se saludaba a los amigos y se recordaba la fecha que coincide con la llegada del hombre en la luna, pero nada más. Las marcas, los bares y las fiestas hicieron lo suyo y aprovecharon el día. En paralelo, crecieron otras fechas más polémicas pero que igual las marcas usaron para colgarse de los festejos y tirar todo el arsenal promocional para empujar a los jóvenes a que las festejen: San Patricio, San Valentín, Halloween también. De todas estas podemos decir que coinciden con el proceso de expansión de la globalización. Pero del Día del amigo, sin embargo, contrariamente a lo que podemos llegar a creer, se festeja en poquísimos países el 20 de julio. Entonces no se le puede echar la culpa a la globalización de imponernos el festejo de una fecha importada. Fuimos nosotros, lo argentinos, los que la inventamos. Y las marcas.
Feliz día, amigos.
Mientras escribo esto, me doy cuenta de que ya toqué ese tema hace más de tres años: http://unmigone.blogspot.com.ar/2012/03/fiestas-importadas.html
Coherente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario