No considero que salir a la calle sea un acto de valentía. No soy el eternauta, ni siquiera Charles Ingalls que sale a cazar liebres para llevar el pan a la mesa. Más bien lo considero un ejercicio de libertad. Es el momento del día en el cual puedo estirar un poco las piernas.
A la mañana me levanto generalmente primero. Estoy escuchando mucho "Ya no mires atrás", el disco postumo de Spinetta. Lo pongo a la mañana mientras todos se van levantando y llegando a la cocina. Ayer, Joaqui le dijo a Agus que le gustaba despertarse con esa música tranquila. Pedro, en cambio, llegó de mal humor quejándose de que lo levantaron con "esa música malísima".
No hay comentarios:
Publicar un comentario